(Liras)
sin que vieras mi empeño, mi ilusión;
te amé con gran hondura,
con todo mi tesón,
sin que tú percibieras mi pasión.
Vivías en tu nube,
en volandas de tus aduladores;
yo, también allí estuve
sin cantar tus loores,
y nunca sospechaste mis amores.
Como pasa la luna
por honda noche desapercibida,
igual, una por una,
ignorada y herida,
pasó mil veces mi alma por tu vida.
Cual martillos de
acero,
tus risas golpeaban insistentes
en un redoble fiero,
mis sienes; y, latentes,
me abrasaban unos celos hirientes.
y has despertado de la farsa aquella.
¡Te olvidaron los memos!
Y aunque sigues muy bella,
aquellos años te dejaron huella.
la madurez ha sentado tu mente,
te sigo amando igual;
razón es suficiente:
¡Unamos nuestro sino
eternamente!
Genito
Es la lira una estrofa de cinco
versos, de la métrica española e italiana, compuesta de tres versos
heptasílabos (siete sílabas) y dos
endecasílabos (once sílabas), de rima consonante, con la siguiente disposición:
7a, 11B, 7a, 7b, 11B.
En la lírica española, fue
introducida por Garcilaso de la Vega.
Preciosas liras
ResponderEliminarMi sobrino aficionado a la literatura,mi ahijado,lo heredó de la pila,me llama Garcilasa,pero a mí me gusta más Petrarquina.
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